El niño puede presentar algunas de estas características:
El diagnóstico de un niño con conductas de agresividad se podrá realizar a través del trabajo multidisciplinario de Neuropediatría, Psiquiatría infantil y Psicología Clínica, para ello se requiere de un análisis cuidadoso a través de una historia clínica detallada obtenida a través de los padres y educadores.
Igualmente, registros desarrollados por padres y profesores, podrán clarificar aspectos relacionados con el contexto de estas conductas.